viernes, 24 de enero de 2014

Otro reto al que entrarle: #Readwomen2014





(Grigg Harris -o Hugh Dancy, pues- lee "La Mano izquierda de la oscuridad", de Úrsula K. LeGuin)

Empezamos el año con #ElRetodelosClásicos, pero hacemos una importante adición a la aventura lectora: también nos uniremos a #ReadWomen2014, una iniciativa que partió de la ilustradora y escritora Joanna Walsh (síganla en twitter: @badaude) para promover el trabajo de miles de autoras que, aunque usted no lo crea, sigue siendo soslayado, ignorado u olímpicamente ninguneado incluso en países con políticas que promueven la equidad de género, como demuestran las cifras de Vida, una organización dedicada a analizar la situación de las mujeres en el arte.

¿Quieren leer algunos clásicos escritos por mujeres este año? Revisen esta lista. ¿Quieren mirar hacia el futuro, y hacerlas prioridad en las novedades de este año? Aquí tienen algunas opciones. Cabe aclarar que ambos enlaces nos muestran alternativas principalmente anglosajonas. ¿Por qué? Bueno, al parecer por tierras hispanohablantes no nos gustan mucho todo lo que "huela" a "cuota de género" (si usted cuestiona severamente esta clase de iniciativas, véase en este nada agradable espejo –acá, mi respuesta). Pero remediaremos ese vacío que se percibe en México. Desde acá y desde otros espacios que quizá no son tan visibles, pero llevan haciéndolo mucho tiempo.

Propongo que si ustedes, queridos lectores, no tienen ninguna escritora favorita, por lo menos se pregunten  por qué. (SPOILER: no es porque no hayan existido grandes escritoras en la historia de la literatura universal o nacional, no hagan de las babosadas argumentos). Quizá sea porque no conocen demasiadas (por qué, pregúntenselo también), quizá porque alguien más les ha dicho que los temas femeninos son de hueva (ídem), o que la "prosa poética" que "utilizan" (¿quiénes, cuándo?) es "soporífera"... (lean a Ana María Shua para que se rían de tamaña tontería)

¿De verdad quieren vivir así toda su vida, perdiéndose de todo un mundo por atenerse a prejuicios rancios y entelarañados (por no decir sexistas)? Muchachada, si no nos hemos enterado de que ha habido mujeres haciendo cosas maravillosas por ahí desde toda la vida, en todos los ámbitos, es debido a la misma razón que nos ha hecho ciudadanas con derecho a votar desde hace apenas 50 años en este país. 




No son "ellas", somos "nosotros": tendríamos que enterarnos más. Leerlas más, por ejemplo.

Por mi parte, intercalaré el #ReadWomen2014 con #ElRetodelosClásicos (y con cualquier ejemplar apetitoso que se me cruce, claro).
Porque ése es el objetivo: dejar que los buenos libros escritos por mujeres también sean parte de nuestra vida, no de un reto nada más.

¡Ojalá se unan!








martes, 14 de enero de 2014

#ElRetodelosClásicos



"Los clásicos son esos libros de los cuales se suele oír decir: «Estoy releyendo...» y nunca «Estoy leyendo ...»"–Italo Calvino

En el Sensacional de libros de Ecléctico queremos que sea un año de clásicos. Esta es la lista que se ha ido armando a partir de deseos, cuotas pendientes, recomendaciones de amigos queridos y ejemplares que odiamos en la secundaria, pero que hoy podrían convertirse en uno de nuestros favoritos.

La única regla inicial establecía que los libros tuvieran, de preferencia, 50 años o más de haberse publicado. Por supuesto, las reglas están para romperse, y quienes nos sugirieron algunos títulos se la brincaron. Está bien: con que lean...

La idea es que sigamos alimentándola con lo que a ustedes les gustaría leer (o releer), y comentar el resultado durante el programa, y también por Twitter y Facebook usando la etiqueta #ElRetodelosClásicos. Siéntase libres de ampliarla en los comentarios. En amarillo se irán marcando los libros que comentaremos en el programa y en qué emisión. Por lo pronto, ya está el primero: La Iliada, de Homero, el viernes 24 de enero.


La Colina de Watership, Richard Addams
La semilla del diablo, Ira Levin
Rebecca, Daphne DuMaurier
Ulises, James Joyce
Manuscrito encontrado en Zaragoza, Jan Potocki
El diablo enamorado, Jaques Cazotte
Ficciones, Jorge Luis Borges. 
La invención de Morel, Bioy Casares
Los Miserables, Victor Hugo
Psicosis, Robert Bloch
El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes Saavedra.
El hombre ilustrado, Ray Bradbury
Crónicas marcianas, Ray Bradbury
La Montaña Mágica, Thomas Mann
La Ilíada, Homero (viernes 24 de enero).
La Odisea, Homero (viernes 28 de febrero)
El señor de los anillos, J. R. R. Tolkien.
Metamorfosis, Ovidio
Comedia, Dante Allighieri
La Historia Interminable, Michael Ende
El Golem, Gustav Meyrink
Los demonios, Dostoievski.
Los mitos de Cthulhu, H.P. Lovecraft
Lolita, Vladimir Navokov
Micromégas de Voltaire
La Rebelión de la Granja, George Orwell
El Principito de Antoine de Saint Exupery
Viaje al oeste, Wu Cheng'en/anónimo.
Sartor Resartus, Thomas Carlyle.
El desierto de los tártaros, Dino Buzzati.
Almas muertas, Nikolái Gógol
El Corsario Negro,  Emilio Salgari
1984, George Orwell
La nave de un millón de años, Poul Anderson.
Pedro Páramo, Juan Rulfo.
Orestíada, Esquilo
Las olas, Virginia Woolf
Timeo, Platón.
La máscara de la muerte roja, Edgar Allan Poe.
Cien años  de soledad, Gabriel García Márquez
Narraciones extraordinarias, Edgar Allan Poe
Las minas del rey Salomón, H. Rider Haggard.
Diario, Ana Frank
El extraño caso de Dr. Jeckyll y Mr. Hyde, Robert Louis Stevenson
De la selva y otros cuentos, Horacio Quiroga
Drácula, Bram Stoker
Los viajes de Gulliver, Johnathan Swift
Vida y opiniones del caballero Tristam Shandy, Lawrence Stern
Los cuentos de Canterbury, Geoffrey Chaucer
Los niños del Brasil, Ira Levin
Matadero 5, Kurt Vonnegut
Las llaves del reino, A.J. Cronin
Cuentos Orientales, Marguerite Yourcenar
La región más transparente, Carlos Fuentes
Diario del año de la peste, Daniel Defoe
La Cabaña del Tío Tom, Harriet Beecher Stowe
Robinson Crusoe, Daniel Defoe
La tumba, José Agustín
Jane Eyre, Charlotte Brontë
Los libros iluminados, William Blake
La campana de cristal, Silvia Plath
Los tres mosqueteros, Alejandro Dumas
Cartas, Plinio el Joven
Northanger Abbey, Jane Austen
Flores para Algernon, Daniel Keyes
La mano izquierda de la oscuridad, Úrsula K. LeGuin
Las uvas de la ira, de John Steinbeck
Orlando, Virginia Woolf
Una habitación propia, Virginia Woolf
El nombre de la rosa, Umberto Eco
El retrato de Dorian Grey, de Oscar Wilde
Mujercitas, Louisa May Alcott
La tierra baldía, T.S. Elliot
El cuaderno dorado, Doris Lessing
Opus Nigrum, Marguerite Yourcenar
En época de lilas: 44 poemas, E.E. Cummings
Los recuerdos del porvenir, Elena Garro
Poemas, Emily Dickinson (traducción de Silvina Ocampo y prólogo de Jorge Luis Borges)
Romancero GitanoPoeta en Nueva York, Federico García Lorca
Frankenstein o el moderno Prometeo, Mary Shelley
Cuentos completos, Katherine Mansfield
Vidas de grandes artistas, Giorgio Vasari
Historia de mi vida, Giacomo Casanova
Un tranvía llamado deseo, Tenesse Williams
Cheri, Colette
The Group, Mary McCarthy
Cartas marruecas, José Cadalso
Los viajes de Gulliver, Johnathan Swift
La guerra y la paz, Lev Tolstoi
Cumbres Borrascosas, Emily Brontë
Madame Bovary, Gustave Flaubert
Ana Karenina, Lev Tolstoi
Las aventuras de Sherlock Holmes, Arthur Conan Doyle
Orgullo y Prejuicio, Jane Austen
La cruzada de los niños, Marcel Schwob
Vidas imaginarias, Marcel Schwob
Memorias de Adriano, Marguerite Yourcenar (viernes 10 de octubre)
Los cuentos de Peter Rabbit, Beatrix Potter
Narrativa completa, Katherine Mansfield

Sugiero que, en caso de agobio, se dejen llevar por el título de alguno que de plano no conozcan (ni al libro, ni al autor). Indaguen un poco, vean si se les antoja, si no, pasen al siguiente. Más que cumplir con un deber, #ElRetodelosClásicos se trata de asombrase, y descubrir por qué estos libros que otros nos han recomendado son, como diría Jorge Luis Borges, leídos con "una misteriosa lealtad."




lunes, 13 de enero de 2014

Niñas que escriben cartas a las que serán en el futuro




http://themetapicture.com/heartbreaking-letter-written-by-a-12-year-old-girl-to-her-future-self/



Yo también lo hice alguna vez. Quizá debería seguir haciéndolo.
Confío en que Taylor siga viendo capítulos de Doctor Who en la Otra Tierra, o en un doblez más amable del espacio-tiempo.

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Justo después de publicar esta entrada, me encontré estas fotografías, que bien pueden ser una especie de carta de una mujer hacia la niña que fue.


viernes, 10 de enero de 2014

Maurice Sendak: sobre la infancia


"Sigo pensando de la misma manera en que pensaba cuando era niño. Aún me angustio. Aún me siento asustado. Nada cambia."

jueves, 9 de enero de 2014

Agonalia




El castillo se ha derrumbado, pero siempre nos han gustado las ruinas. Y más si son de paredes traslúcidas por las que se pudieron entrever cosas que existen a ratos, o valses tocados al revés.
Enero me ha soñado y aquí estoy otra vez. Soy la octava versión de mí misma, y por tu gracia, Jano, miro hacia atrás con gratitud honda, y también miro hacia adelante con la inocencia que merecen los inicios fraguados bajo tu arco.

No he matado ningún cordero para esta Agonalia, dios de los principios y de los finales, y no lo voy a hacer (muchas cosas han cambiado desde que eras popular, oh, guardián). Pero yo me llamaré a mí misma Agnes, me ofrecezco como el sacrificio necesario para agradarte, Jano, y es que necesito de ti. Que abras las puertas de lo que viene y lo que se va, mientras duplico la frente, la mirada hacia atrás y hacia adelante, generoso bifronte. 

Nos gustan las ruinas y los umbrales. Todo aquello que sea una posibilidad. Una forma de no diluirse en la corriente del gran río, de no morir mientras una no hace mas que estar, y pensar en los problemas pequeñitos, e ignorar todo lo que rota y suena allá arriba, la canción del vacío entre las estrellas.

Camino entre las ruinas, en el Jardín de las Cuatro Estaciones. Recogemos ópalos como conchas marinas a la orilla de la playa. Miramos, Jano, hacia el mar y la montaña. Junto a mí, un gato, que es siempre el mismo gato, observa su recorrido en la línea de tiempo, cómo caminamos juntos. Hacia mis padres y mi hermana y mis abuelos y mis tíos, y también hacia mis sobrinos, hacia el hueco luminoso que será una familia, hecha de otras cosas, no precisamente de carne. 

Aquí estoy, Jano, vestida de cordero, dispuesta a hacer que cuenten todos los principios y todos los finales de mi vida.





La alegría es un bien escaso